Alec Empire, Lider de Atari Teenage Riot
EL PUNK ESTA MUERTO
Tras una etapa de depresión, el líder de Atari Teenage Riot escapa de la muerte y descubre su «diario personal» en un CD doble que aúna el ruido y la furia con «un viaje a mi infierno interior».
El líder tecno-ruidista de los infatigables y abrasivos Atari Teenage Riot sufrió una agónica experiencia personal en el año 2000, pero salió de la misma gracias a la creación artística, a la manufactura sintética y rockista de un cancionero que ahora divulga en formato de CD doble. Se titula Inteligence And Sacrifice (Digital Hardcore Recordings-Mastertrax), la primera rodaja llega pletórica de breakcore más articulado que el de ATR, y la segunda es tranquila cual marasmo mórbido.
Alec Empire, en la actualidad un consumado productor y remezclador (Björk, Rob Zombie, Slayer, Jon Spencer, Einsturzende Neubauten…) que ha actuado en más de cincuenta países como DJ y que ha girado con tótems como Beck, Rage Against The Machine, Ministry o Nine Inch Nails, nos atiende desde Berlín Oeste, la ciudad donde nació en 1972.
¿Qué oías de pendejo?
Mis primeros dos discos fueron regalos de Navidad. Uno era Computer World, de Kraftwerk, y el otro un álbum de Trio, el que incluía el éxito Da Da Da. ¿Y sabes qué? No me gustó el de Kraftwerk, así que me metí a fondo con el de Trio. Me gustaría poder darle la vuelta a eso para aparentar ser más cool, je, je, pero esta es la verdad. La siguiente música en la que me introduje fue el hip-hop de la vieja escuela. The Message, de Grandmasterflash; Rockit, de Herbie Hancock, y Wild Style. Ese fue el material primigenio que me empujó a la música.
¿Y cuáles son tus influencias?
En realidad, no tengo influencias. Puede sonar un poco arrogante, pero es la verdad. En este punto de mi vida sé cómo producir un montón de estilos musicales diferentes. Soy capaz de decidir qué técnica quiero utilizar para componer y grabar. Esto abarca desde el free jazz al hip-hop, el punk rock y el metal; o desde la electrónica experimental al noise y mucho más. Hace años estuve muy colgado por el punk rock americano, por gente como Richard Hell, Johnny Thunders, Stooges y Crime. Así que cuando uso elementos punk, voy en esa dirección. En el metal tiendo hacia Slayer y Pantera. Escucho mogollón de estilos y también soy DJ y coleccionista de discos, pero lo más importante es que he militado anteriormente en bastantes escenas musicales y las he vivido intensamente.
¿Por ejemplo?
De adolescente viví la escena punk alemana. Mi banda se llamaba Die Kinder y actuó con todas esas otras formaciones germanas al estilo de Die Toten Hosen. Eso sucedió cuando la escena todavía estaba creciendo y era pequeña. Luego, me aburrí del punk, y del punk divertido que vendría después, que no tenía energía para mí. Lo dejé y llegué al tecno de Detroit y al acid house en 1989.
¿Y…?
Entonces empecé a hacer discos tecno hasta 1993. Debí hacer unos sesenta EPs underground para DJs, todos de tecno y house. Lo más conocido de esa época se editó en sellos como Force Inc Music y Analogue Rec. Ahí fue cuando de verdad aprendí a producir. Debes ser muy rápido y muy bueno para sobrevivir en el underground. No entras en listas con semejante material, así que hay que trabajar y acabar productos y más productos, disco tras disco, para sacar dinero. Desde que dejé la escuela, siempre he vivido de la música. Hice mi primer disco con 18 años.
Respuesta al neonazismo
¿Cómo descubriste el tecno y las máquinas?
Yendo a las primeras fiestas acid house de Berlín y a algunas otras del sur de Francia. Estaba muy metido en el rollo musical, donde, por aquel entonces, se hacía todo con un equipo sencillo y barato, como el de la marca Roland (TR-808 y 909, TB 303) más un sampler. Me lo monté con eso y pronto pinché en las primeras raves tecno de Berlín y otras ciudades de Alemania.
¿No crees que la mayoría de los ejecutantes de tecno no tienen actitud rock?
Depende de a qué te refieras con eso de actitud rock. ¡Yo he estado siempre en la movida rock! Quería que mi música rockeara y agitara a las audiencias. Creo que ese estilo es una forma de expresión mucho más libre que el dance. El significado del rock cambia cada pocos años. Y opino que la mayoría de los DJs tienen una pésima actitud de estrellas del rock, más que las verdaderas estrellas del rock.
¿Cómo te animaste a montar Atari Teenage Riot?
Formamos ATR a principios de 1992 como reacción al creciente movimiento neonazi que se registraba tanto en Alemania después de la reunificación como en el resto de Europa. Era la época de los gravísimos ataques a los solicitantes de asilo, cuando los skinheads quemaban casas y asesinaban a familias. El resto de la sociedad aplaudía o toleraba los ataques. Como forma de protesta, quisimos crear una banda que poseyera el sonido de las algaradas y las acciones contra el sistema que producía y apoyaba esa ideología fascista.
¿Por qué elegiste un nombre tan singular?
Lo quise para describir el concepto y la idea de la banda.
Alec Empire, todo un ídolo en Asia, tiene allí un cómic inspirado en él.
¿Consideras a ATR una banda de punk?
No. El punk está muerto desde hace mucho tiempo, si lo tomamos como una forma musical. En cambio, la actitud punk sí está viva y puede encontrarse en diversos aspectos de la vida. ATR no es punk en términos musicales, pero quizá tengamos su actitud. De hecho, nunca hemos querido conformarnos con cualquier cosa y nos enfrentamos a la mierda de la política en unos tiempos en los que nadie quería escuchar. Además, nuestra música es de confrontación, o sea que puede considerarse punk.
Háblanos de Intelligence And Sacrifice.
Hay numerosas impresiones genuinas del rock and roll: ser adicto a una chica, los tipos duros de los colectivos, pelear buscando un subidón de adrenalina, la escalada de violencia, la maldita codicia, el sexo, la guerra, América, los sueños, la religión y los rituales satánicos, la manipulación de las mentes estúpidas… Básicamente, va de que ya no trago con cualquier mierda, especialmente después de haber seguido un camino de tantos años para llegar hasta aquí.
¿Por qué es doble?
El CD-1 es igual que conducir un coche veloz contra una pared. Pura adrenalina, pasión y agresión. El CD-2 es el interior de mi mente, un viaje a través del infierno, el diario personal de una larga y oscura fase de mi vida.
Concepto ‘chill out’
¿Este segundo CD recoge tu concepto del chill out?
Lo describo como el viaje a través del infierno interior. En el año 2000 pasé por una etapa oscura en la que casi me mato a mí mismo. Entonces hice este segundo CD. Describe cuán alienado me sentía la mayor parte del tiempo en nuestra sociedad. El aislamiento; es decir, cuando estás atrapado dentro de ti y no quieres que te venga nada del exterior. Es como una espiral decreciente que te chupa cada vez más profundamente. Me escapé de ahí haciendo Intelligence And Sacrifice y me alegra estar todavía aquí.
¿Por qué elegiste este título, Inteligencia y sacrificio?
Inteligencia aparece por un montón de cosas: la tecnología, los coeficientes de inteligencia de los seres humanos, las mentes belicosas, el poder de las ideas, la información… El sacrificio representa una contradicción respecto a lo anterior. Es lo primitivo, lo religioso, la carne, las víctimas y lo espiritual, el fuego y las creencias. Ambos se relacionan mutuamente. El título incluye una contradicción que yo mismo acarreo. Creo que describe el álbum de la mejor manera posible.
¿Ves diferencias entre este álbum y los de ATR?
Lo veo como algo muy distinto a ATR. Por supuesto, yo soy quien soy y mantengo un acercamiento a un sonido que me distingue del resto de ahí fuera. Pero, en definitiva, tengo más libertad cuando trabajo en solitario. ATR es un concepto muy estricto y definido que trabaja como banda, pero yo quiero –y puedo– hacer mucho más. Una gran diferencia con ATR es que no pretendo construir su muro de sonido en mis discos en solitario. Intelligence And Sacrifice es más colorista y no abusa del mismo ruido loco.
Pero también lo utilizas.
Todavía uso ruido y mi mierda suena heavy, pero quiero definir las texturas. Hay una gran diferencia en el proceso de grabación. En ATR empleamos equipos de baja fidelidad y ocho canales en la mesa de mezclas. En solitario, uso también alta tecnología y pongo unas 120 pistas en funcionamiento: tengo conectadas cinco diferentes consolas analógicas.
Bien, y como regalito, les dejo un linK donde pueden bajar el CD 1 de la producción "Inteligence And Sacrifice (Digital Hardcore Recordings-Mastertrax)"
(el otro disco es muy "pajero", y la idea es concer el lado Raw de Alec Empire...luego les doy el link para bajar ATR)
Tras una etapa de depresión, el líder de Atari Teenage Riot escapa de la muerte y descubre su «diario personal» en un CD doble que aúna el ruido y la furia con «un viaje a mi infierno interior».
TEXTO: ÓSCAR CUBILLO / FOTOS: ÁNGELA LUBRA
El líder tecno-ruidista de los infatigables y abrasivos Atari Teenage Riot sufrió una agónica experiencia personal en el año 2000, pero salió de la misma gracias a la creación artística, a la manufactura sintética y rockista de un cancionero que ahora divulga en formato de CD doble. Se titula Inteligence And Sacrifice (Digital Hardcore Recordings-Mastertrax), la primera rodaja llega pletórica de breakcore más articulado que el de ATR, y la segunda es tranquila cual marasmo mórbido.
Alec Empire, en la actualidad un consumado productor y remezclador (Björk, Rob Zombie, Slayer, Jon Spencer, Einsturzende Neubauten…) que ha actuado en más de cincuenta países como DJ y que ha girado con tótems como Beck, Rage Against The Machine, Ministry o Nine Inch Nails, nos atiende desde Berlín Oeste, la ciudad donde nació en 1972.
¿Qué oías de pendejo?
Mis primeros dos discos fueron regalos de Navidad. Uno era Computer World, de Kraftwerk, y el otro un álbum de Trio, el que incluía el éxito Da Da Da. ¿Y sabes qué? No me gustó el de Kraftwerk, así que me metí a fondo con el de Trio. Me gustaría poder darle la vuelta a eso para aparentar ser más cool, je, je, pero esta es la verdad. La siguiente música en la que me introduje fue el hip-hop de la vieja escuela. The Message, de Grandmasterflash; Rockit, de Herbie Hancock, y Wild Style. Ese fue el material primigenio que me empujó a la música.
¿Y cuáles son tus influencias?
En realidad, no tengo influencias. Puede sonar un poco arrogante, pero es la verdad. En este punto de mi vida sé cómo producir un montón de estilos musicales diferentes. Soy capaz de decidir qué técnica quiero utilizar para componer y grabar. Esto abarca desde el free jazz al hip-hop, el punk rock y el metal; o desde la electrónica experimental al noise y mucho más. Hace años estuve muy colgado por el punk rock americano, por gente como Richard Hell, Johnny Thunders, Stooges y Crime. Así que cuando uso elementos punk, voy en esa dirección. En el metal tiendo hacia Slayer y Pantera. Escucho mogollón de estilos y también soy DJ y coleccionista de discos, pero lo más importante es que he militado anteriormente en bastantes escenas musicales y las he vivido intensamente.
¿Por ejemplo?
De adolescente viví la escena punk alemana. Mi banda se llamaba Die Kinder y actuó con todas esas otras formaciones germanas al estilo de Die Toten Hosen. Eso sucedió cuando la escena todavía estaba creciendo y era pequeña. Luego, me aburrí del punk, y del punk divertido que vendría después, que no tenía energía para mí. Lo dejé y llegué al tecno de Detroit y al acid house en 1989.
¿Y…?
Entonces empecé a hacer discos tecno hasta 1993. Debí hacer unos sesenta EPs underground para DJs, todos de tecno y house. Lo más conocido de esa época se editó en sellos como Force Inc Music y Analogue Rec. Ahí fue cuando de verdad aprendí a producir. Debes ser muy rápido y muy bueno para sobrevivir en el underground. No entras en listas con semejante material, así que hay que trabajar y acabar productos y más productos, disco tras disco, para sacar dinero. Desde que dejé la escuela, siempre he vivido de la música. Hice mi primer disco con 18 años.
Respuesta al neonazismo
¿Cómo descubriste el tecno y las máquinas?
Yendo a las primeras fiestas acid house de Berlín y a algunas otras del sur de Francia. Estaba muy metido en el rollo musical, donde, por aquel entonces, se hacía todo con un equipo sencillo y barato, como el de la marca Roland (TR-808 y 909, TB 303) más un sampler. Me lo monté con eso y pronto pinché en las primeras raves tecno de Berlín y otras ciudades de Alemania.
¿No crees que la mayoría de los ejecutantes de tecno no tienen actitud rock?
Depende de a qué te refieras con eso de actitud rock. ¡Yo he estado siempre en la movida rock! Quería que mi música rockeara y agitara a las audiencias. Creo que ese estilo es una forma de expresión mucho más libre que el dance. El significado del rock cambia cada pocos años. Y opino que la mayoría de los DJs tienen una pésima actitud de estrellas del rock, más que las verdaderas estrellas del rock.
¿Cómo te animaste a montar Atari Teenage Riot?
Formamos ATR a principios de 1992 como reacción al creciente movimiento neonazi que se registraba tanto en Alemania después de la reunificación como en el resto de Europa. Era la época de los gravísimos ataques a los solicitantes de asilo, cuando los skinheads quemaban casas y asesinaban a familias. El resto de la sociedad aplaudía o toleraba los ataques. Como forma de protesta, quisimos crear una banda que poseyera el sonido de las algaradas y las acciones contra el sistema que producía y apoyaba esa ideología fascista.
¿Por qué elegiste un nombre tan singular?
Lo quise para describir el concepto y la idea de la banda.
Alec Empire, todo un ídolo en Asia, tiene allí un cómic inspirado en él.
¿Consideras a ATR una banda de punk?
No. El punk está muerto desde hace mucho tiempo, si lo tomamos como una forma musical. En cambio, la actitud punk sí está viva y puede encontrarse en diversos aspectos de la vida. ATR no es punk en términos musicales, pero quizá tengamos su actitud. De hecho, nunca hemos querido conformarnos con cualquier cosa y nos enfrentamos a la mierda de la política en unos tiempos en los que nadie quería escuchar. Además, nuestra música es de confrontación, o sea que puede considerarse punk.
Háblanos de Intelligence And Sacrifice.
Hay numerosas impresiones genuinas del rock and roll: ser adicto a una chica, los tipos duros de los colectivos, pelear buscando un subidón de adrenalina, la escalada de violencia, la maldita codicia, el sexo, la guerra, América, los sueños, la religión y los rituales satánicos, la manipulación de las mentes estúpidas… Básicamente, va de que ya no trago con cualquier mierda, especialmente después de haber seguido un camino de tantos años para llegar hasta aquí.
¿Por qué es doble?
El CD-1 es igual que conducir un coche veloz contra una pared. Pura adrenalina, pasión y agresión. El CD-2 es el interior de mi mente, un viaje a través del infierno, el diario personal de una larga y oscura fase de mi vida.
Concepto ‘chill out’
¿Este segundo CD recoge tu concepto del chill out?
Lo describo como el viaje a través del infierno interior. En el año 2000 pasé por una etapa oscura en la que casi me mato a mí mismo. Entonces hice este segundo CD. Describe cuán alienado me sentía la mayor parte del tiempo en nuestra sociedad. El aislamiento; es decir, cuando estás atrapado dentro de ti y no quieres que te venga nada del exterior. Es como una espiral decreciente que te chupa cada vez más profundamente. Me escapé de ahí haciendo Intelligence And Sacrifice y me alegra estar todavía aquí.
¿Por qué elegiste este título, Inteligencia y sacrificio?
Inteligencia aparece por un montón de cosas: la tecnología, los coeficientes de inteligencia de los seres humanos, las mentes belicosas, el poder de las ideas, la información… El sacrificio representa una contradicción respecto a lo anterior. Es lo primitivo, lo religioso, la carne, las víctimas y lo espiritual, el fuego y las creencias. Ambos se relacionan mutuamente. El título incluye una contradicción que yo mismo acarreo. Creo que describe el álbum de la mejor manera posible.
¿Ves diferencias entre este álbum y los de ATR?
Lo veo como algo muy distinto a ATR. Por supuesto, yo soy quien soy y mantengo un acercamiento a un sonido que me distingue del resto de ahí fuera. Pero, en definitiva, tengo más libertad cuando trabajo en solitario. ATR es un concepto muy estricto y definido que trabaja como banda, pero yo quiero –y puedo– hacer mucho más. Una gran diferencia con ATR es que no pretendo construir su muro de sonido en mis discos en solitario. Intelligence And Sacrifice es más colorista y no abusa del mismo ruido loco.
Pero también lo utilizas.
Todavía uso ruido y mi mierda suena heavy, pero quiero definir las texturas. Hay una gran diferencia en el proceso de grabación. En ATR empleamos equipos de baja fidelidad y ocho canales en la mesa de mezclas. En solitario, uso también alta tecnología y pongo unas 120 pistas en funcionamiento: tengo conectadas cinco diferentes consolas analógicas.
Bien, y como regalito, les dejo un linK donde pueden bajar el CD 1 de la producción "Inteligence And Sacrifice (Digital Hardcore Recordings-Mastertrax)"
(el otro disco es muy "pajero", y la idea es concer el lado Raw de Alec Empire...luego les doy el link para bajar ATR)
2 Comments:
Your website has a useful information for beginners like me.
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