miércoles, enero 23, 2008

Chile contigo y con El Mercurio

“Chile Contigo”...mmmm...el nuevo periódico nacional, aunque no se si tan nacional. Acá todavía no lo veo. Per bueno, este medio de comunicación del gobierno, según dicen, es para dar a conocer sus iniciativas, proyectos e ideas; todos motivos por los cuales las críticas no se hicieron esperar. El grupo de la “otra orilla” lo tildó de pasquín, palabra que por cierto no se si saben muy bien que significa, así que vamos con la definición que da nuestra biblia idiomática: “Pasquín. (Del it. Pasquino, nombre de una estatua en Roma, en la cual solían fijarse libelos o escritos satíricos). 1. m. Escrito anónimo que se fija en sitio público, con expresiones satíricas contra el Gobierno o contra una persona particular o corporación determinada. 2. m. El Salv., Nic., Ur. y Ven. Diario, semanario o revista con artículos e ilustraciones de mala calidad y de carácter sensacionalista y calumnioso.

Hecha la aclaración del significado de la palabra, podemos darnos cuenta que muchas veces usamos términos sólo porque sabemos pronunciarlos pero no sabemos que significan. La primera acepción (esta palabra la averiguan ustedes) no podría estar más alejada de la realidad, ya que “Chile Contigo” no esta pegado en ninguna parte ni menos, al ser una publicación de gobierno, se tiraría mierda solo. Ahora, si vemos la segunda acepción tampoco podemos decir que la publicación (que vimos por la tele) sea de mala calidad, sobre los de sensacionalista no me voy a referir ni menos a lo que dice relación con calumnioso, sólo porque aún no le he leído.

También se dijo que era un instrumento de propaganda, lo que no estaría muy alejado de la realidad si vemos que uno de los significados dice que es una acción o efecto de dar a conocer algo con el fin de atraer adeptos o compradores. Fue este punto el que llamó mi atención, ya que una de las críticas hechas por “Los Otros” fue decir que era un instrumento de propaganda. Entonces hilemos fino: si hablamos de medios de comunicación propagandísticos, nosotros ya teníamos uno (o según se prefiera, tenemos uno) y ese es el llamado “decano del periodismo”, o sea el tabloide de Edwards y C.I.A. (léase compañía, por favor), que por años a jugado un importante rol en materia de poner temas e influenciar la agenda pública. Para todos es un hecho que le hace propaganda a “los Otros”. Tampoco debemos olvidar que este “decano”, hasta unos pocos años atrás (e incluso hasta un par de mese atrás) aún hablaba de PRE-SUN-TOS detenidos desaparecidos...¿o no?, así que no vengan a decir ahora que se están utilizando medios para fines partidistas o para atraer adeptos, si esta práctica siempre se ha hecho y se seguirá haciendo...por ambos lados de la avenida política.

Alguien dijo que esa publicación debería haberse hecho en los medios tradicionales, lo que involucra un pago al medio por hacer eso...¿o no?, y que pasa cuando alguien es el que “pone las fichas”, ese es el que decide que leemos y que no, así que ese argumento es debatible.

Discusiones más o menos, creo que esto nos debería servir para comenzar a debatir sobre el financiamiento de los medios de comunicación tanto nacionales como locales, y como el estado destina recursos para incentivar la creación de nuevos medios, ya que a nivel nacional, como a nivel local, tenemos sólo dos formas de ver las cosas, y cada una de ellas marcadamente diferentes. Y lo que es peor, si sale una voz diferente, distinta o se ve una mirada crítica, en un medio nuevo...ese medio esta destinado a la muerte, ya que quienes tiene las fichas, no las van a poner en medio que se atreva a decir cosas que de una u otra manera los puedan tocar.

martes, enero 15, 2008

No hay "Mall" que por bien no venga

Dicen que no hay “mall” que por bien no venga, o por lo menos creo que eso es lo que piensan varios de los Coyhaiquinos sobre la ESPERADA construcción de un mall en la ciudad. Lamentablemente hay quienes egoístamente pretenden frenar el desarrollo de Coyhaique, porque una construcción como esa por donde se mire...es desarrollo.

Leyendo la noticia sobre la negativa (por ahora) de definir si se construye o no esa “catedral del consumismo”, varias fueron las dudas que me surgieron como un simple hijo de vecino transplantado a esta lejana porción de tierra y que inevitablemente me hicieron reflexionar sobre algunas de las declaraciones allí vertidas por nuestros REPRESENTANTES regionales. Uno de ellos levantó la voz en beneficio del, según él, desmejorado comercio local, el que se vería afectado con la llegada de multi-tiendas que tanto daño le hacen a la economía...de los bolsillo de los comerciantes, porque al de nosotros sería una excelente oportunidad de poder ahorrar un par de lucas, ya que la libre competencia regula los precios de cualquier mercado, o sino vean como van los valores y promociones de los pasajes aéreos con la llegada de una aerolínea más. El problema que ven ellos es que tendrían que bajar sus precios para poder competir, cosa que actualmente no hacen. Se imaginan poder vitrinear, comparar y decidir en relación al precio y no “a lo que hay, no más”, sería genial.

Alguien dijo que falto “participación ciudadana”, pero hay que ser realista, cuando se convocan a reuniones para decidir cualquier tema, los que llegan son siempre los mismos: organizaciones defensoras de la tijereta, grupos promotores de vida en marte, pero la gente común y corriente no llega, y no llega porque aún tienen en su mente la idea fija que su opinión importa poco a nada, idea impuesta por quienes usan a la gente con fines particulares, pero eso es otro tema. El punto es que la gente, actualmente, le importa más como ahorrar en el mes y poder sentirse bien comprando una pilcha que quizás no sea de “marca” ni menos exclusiva, pero si bonita y útil, y eso actualmente es un poco difícil en Coyhaique, lugar en que es habitual escuchar “se acabaron”, “la otra semana llegan” o “noooo, no tenemos, y no se donde pueda encontrar”.

Probablemente este comentario herirá algunas epidermis, pero seamos sinceros, un mall regularía los precios, serviría de punto de encuentro de nuestras incipientes tribus urbanas, tendríamos la posibilidad cierta de salir el fin de semana a ver cosas entretenidas (porque ya me aburrí de ver herramientas, tazas de baño y ampolletas...muchos sabrán a que me refiero) y en definitiva traería otros aires a la región, que además tendría un efecto casi psicológico en todos...nos sentiríamos más grandes, veríamos a Coyhaique más ciudad. O no han escuchado cuando alguien dice de otra ciudad “no, allá hay cine, algunos pub`s y TENEMOS MALL”.

Pero bueno, cada cual sabe donde le aprieta el zapato y lo que quiere a futuro, y no se trata de algo político, ni menos ser de allá ni de acá, sino que de una simple opinión como la muchos otros que queremos que Coyhaique crezca, se desarrolle y entregue más alternativas a quienes vivimos acá, alternativas que por cierto no han tenido la suficiente difusión por quienes se oponen a la “aberración” que según ellos significaría la construcción del mall; porque las razones para oponerse son muchas y variadas, pero las alternativas concretas que nos entregan pocos las conocemos. ¿Cuánto tiempo esta “botado” ese terreno, cuantas actividades para la comunidad se han desarrollado o mejor dicho organizado en ese “pulmón verde” de Coyhaique?, pocazas por decirlo menos. Y en definitiva, como decía al principio, seamos positivos y pensemos que no hay “mall”, que por bien no venga.